La Ingobernabilidad interna del país
Años aciagos estamos atravesando los venezolanos durante nuestra última década, una crisis económica brutal, crisis social, política, institucional y en suma una crisis de valores profunda que penetra a toda la sociedad y su institucionalidad y estructura burocrática.
La gobernanza, es la capacidad que poseen los dirigentes gubernamentales de un país, estado y nación para conducir sus destinos y, mantener bajo su control sus instituciones en beneficio de la sociedad. No obstante, esa no parece ser la realidad en nuestra amada patria.
Analicemos los hechos, que desde mi perspectiva plantean la hipótesis de un estado de ingobernabilidad, pudiendo esta incluso ser planificada desde altas esferas del poder político nacional y desde el poder económico supranacional para dinamitar y socavar el espíritu de rebeldía, de insurgencia y de libertad que caracteriza la idiosincrasia del venezolano desde la propia conquista y colonización. Nuestros indígenas en primer lugar, son la prueba fehaciente de nuestra rebeldía y la no aceptación de imposiciones imperiales, acto seguido la historia nos deja innumerables ejemplos en toda nuestra lucha de independencia, a través de negros esclavos, mestizos caribeños y el pueblo en general.
Ahora bien, vayamos a los hechos más recientes. En los momentos actuales, se lleva a cabo la operación “Caiga quien caiga”, donde se ha dado como resultado la aprensión de casi 50 funcionarios de distintos niveles del poder público nacional, incluyendo jueces, involucrados en bochornosos escándalos y actos de corrupción, en medio de las peores dificultades socioeconómicas que atravesamos. Esta es la primera muestra de ingobernabilidad.
Pero, porque es una muestra de ingobernabilidad, si a todas luces y lógica parece lo contrario, toda vez que fueron puestos a la orden del sistema de justicia y que según el propio Fiscal General de la República, la mayoría de ellos han confesado sus crímenes y se han acogido al beneficio de la delación para tratar de minimizar un poco su condena, lo que ha permitido la captura de otros funcionarios públicos involucrados en la misma trama de corrupción que no sabemos hasta donde tendrá sus tentáculos en este caso en particular, que involucraba prostitución, saqueo de las arcas del estado – hasta ahora se habla de 3.600 millones de dólares confirmados-, adquisición de bienes por legitimación de capitales, entre otros hechos que delatan la traición a la patria por parte de estos funcionarios, que otrora se rasgaban las vestiduras y se daban golpes de pecho a nombre de una causa, demostrando una inmoralidad sin precedentes en nuestra historia.
En ese sentido, es ingobernabilidad porque si el estado-nación y sus instituciones hicieran una verdadera lucha frontal contra la corrupción, cuáles serían los resultados bajo nuestro contexto actual nacional y global. Desde mi perspectiva, los hechos actuales tienen más que ver con una lucha de poder y estrategia política interna, que una verdadera lucha contra este flagelo que pudre el alma humana y apuñala a la madre patria por la espalda, la desangra de forma lenta y paulatina y destruye las esperanzas y sueños de un pueblo.
Esto es evidente, en la concentración de poder que se estaría gestando si efectivamente como algunos medios de comunicación han publicado la SUNACRIP pasa a manos del Ministerio del Poder Popular para las Finanzas. Lo cual dejaría en manos de una sola persona, las instituciones más vitales del país.
Volviendo a mi hipótesis de la ingobernabilidad, imaginen por un momento la otra parte de una posible lucha real y frontal contra la corrupción en nuestro país en los actuales momentos, veamos a mi juicio lo que podría suceder, siendo que como miembros de la contraloría social por ser pueblo de a pie, todos los días vemos con indignación y arrechera a Alcaldes, Gobernadores, Diputados regionales y nacionales, Ministros, Presidentes y directores generales de institutos, entes y empresas del estado inmersos en hechos de corrupción a través de su calzado, vestimenta, casas, accesorios de lujos que portan, en sus tremendas camionetotas, etc., así vemos a sus familiares y allegados, los que el pueblo llama los enchufados.
Pero, no es menos cierto que también sabemos en el pueblo porque además a muchos les toca colaborar con el sostenimiento de este sistema corrupto ante la desidia y la ingobernabilidad, o acaso no sabemos que hay corrupción en los niveles medios e inferiores de las instituciones del estado, no sabemos que los cuerpos de seguridad del estado están podridos desde su propia existencia, que los técnicos de CANTV cobran en acuerdos con los ciudadanos para que les puedan reparar averías en líneas telefónicas e internet, que roban y cobran vacunas porteros, secretarias, asistentes, que pasa lo mismo en registros y notarias, con los funcionarios del SENIAT, con los fiscales de la SUNDES, SUNAGRO, que pasa esto y se replica en prácticamente toda la institucionalidad y más allá en el poder popular y político, voceros de concejos comunales, jefes de comunidad, de calle y de CLAP, en todas las dimensiones del poder y la administración pública del estado.
Solo el pueblo de a pie ve esto a diario, me pregunto, como el pueblo de a pie, comerciantes y empresarios viven esto a diario y contribuimos de una u otra manera a mantener el circulo viciosos de este sistema atroz, solo nosotros tenemos ojos y oídos para ver y escuchar esta realidad. Los encargados de dirigir las instituciones del estado no ven ni escuchan esta realidad, será posible esto, es una pregunta sobre la que debemos reflexionar todos de manera fría y racional, o nos toman por tontos e imbéciles.
Entonces que pasaría, si asumimos la lucha real y frontal contra la corrupción y luego en el argot coloquial y policial necesitaríamos un golpe para que hablen y quien sabe cuántos para que callen, por todo lo que se va a descubrir cuando empiecen a caer como moscas sacudidas por una palmada inesperada. Tiene el Estado capacidad logística e infraestructura para poner en custodia penitenciaria y privados de libertad a tantos funcionarios, esa sería la primera interrogante. Segundo, habría jueces, fiscales del MP y abogados honestos suficientes en las instituciones del estado que no vayan a ser procesados también para poder llevar a cabo este proceso, imaginen por un momento el caos institucional que acarrearía esta situación.
En ese marco, entendiendo que la sociedad es una extensión del individuo y a su vez, nuestro gobierno es una extensión también del individuo, habrá personas honestas que no hayan sido penetradas por el germen de la corrupción para sustituir a las personas que serán puestas a la orden de la justicia. O nuestra sociedad sigue con la tesis cuarto republicana, ponme donde hay, no importa lo que gane. ¿Cómo construir una sociedad socialista con estos antivalores?
A veces por emocionalidad y fanatismo tendemos a creernos e imaginarnos cosas fantasiosas, totalmente alejadas de una realidad cruda. Y esto sucede, porque desconocemos el funcionamiento de nuestra máquina humana, el origen de nuestros pensamientos, sentimientos y emociones, porque desconocemos el funcionamiento de nuestro cerebro, de nuestra psicología interna y las elites de poder global, los llamados amos del mundo manejan un conocimiento milenario que nosotros no y, no en vano han invertido miles de millones de dólares en los centros de pensamiento global (Instituto Tavistock, Escuela de Chicago y de Frankfurt) y en la psicología en general, sobre todo en psicología social, sociología, antropología, psicología de las masas e ingeniería social, todo para dominar nuestra conducta, para construirla a través de ciertas condiciones y contextos artificialmente creados e inducidos con complicidad de dirigentes políticos internos para poder cumplir con sus planes y objetivos. Hemos sido experimentos de las élites y Venezuela no ha escapado de esa realidad tangible y visible del tamaño de Júpiter.
Ninguna revolución externa podrá realizarse, si antes no hay una revolución interna, traducida en una revolución de la conciencia, que solo es posible mediante grandes esfuerzos y voluntad individual para revolucionar nuestra psiquis y comenzar a pensar, sentir y actuar de una manera y forma distinta. Lo exterior es reflejo de lo interior, entonces cuando vemos estos flagelos en nuestra institucionalidad es porque ello, es reflejo del interior de nuestra sociedad.
Por otra parte, porque hay ingobernabilidad, porque conociendo las tablas salarias de la administración pública en todos sus niveles y dimensiones (vertical y horizontal), las cuales se han hecho famosas los últimos años, por la grave situación salarial que atravesamos los empleados públicos de este país, por la violación y olvido de los contratos y convenciones colectivas, por la torpeza en el manejo de los recursos y el discurso capitalista de que para aumentar sueldos y salarios hay que producir riqueza primero, engañando a la sociedad, haciéndoles creer que el Estado funciona bajo una lógica igual a la de una empresa privada (no entendiendo que las empresas son usuarias del dinero y que en cambio el Estado es un emisor del dinero), en palabras del propio Ministro del Poder Popular para el Trabajo en entrevista pública realizada por el canal Globovisión, ningún funcionario público está contento, un ministro gana 700 Bs. Digitales.
Si comienza una lucha contra la corrupción y suponiendo que las primeras hipótesis aquí planteadas fuesen superadas, quien ocuparía los cargos públicos si ya no se puede robar, ni matraquear ganando una miseria, sobre todo para los altos cargos públicos con sus infinitas responsabilidades ganando un sueldo que no se corresponde con estas. Y esto acaso es gobernabilidad, tiene el gobierno realmente control sobre esta situación y ha analizado las consecuencias que este cáncer en fase de metástasis le está haciendo al país y al proyecto civilizatorio latinoamericano en aras de rebelarnos contra el poder imperial y de las élites globales.
Pero, mucho peor aún es cuando desde el propio Estado se planifica llevar a tu nación a este estado de caos y situación dramática, permitiendo que la corrupción y la ineficiencia aguas arriba y aguas abajo socaven la nación para dejarle las puertas abiertas a la élite plutocrática que gobierna el planeta, en su afán por resetear el sistema e imponer un gobierno mundial bajo la filosofía globalista, los patriotas y soberanistas debemos alzar nuestras voces contra esta operación, denunciarla públicamente y contrarrestarla.
Evidencia de este último planteamiento sobran, así tenemos la firma convenio de Venezuela con la ONU para cumplir su agenda del mal, la agenda de las élites que la financian y a quienes responde, la agenda 2030 suscrita el año pasado y que en representación de nuestro país estuvo el Ministro del poder Popular para la Planificación. Asimismo, lo que se ha venido haciendo por los supuestos derechos de la comunidad LGTB+, otro invento de las élites globales para destruir aún más los valores de la sociedad global y el concepto de Familia, como elemento vital en una sociedad. La ley contra el buylling que atenta contra la idiosincrasia de alegría y jodedera que forma parte de nuestra venezolanidad, solo para ponerse acorde a los designios internacionales, la ley de lenguaje inclusivo, una aberración que atenta contra la inteligencia, que daña todas las normas que hacen del lenguaje un apasionante mundo de estudio, ciencia y arte. Todo esto, es un plan de las élites globales que viene vestida, disfrazada por supuesto, de derechos humanos, progresismo y evolución, cuando es todo lo contrario.
Mucho peor, cuando intelectuales se ponen de lado de estas operaciones por ignorancia, desconocimiento de los planes de las élites por no tener una visión dialéctica y multidimensional de lo que sucede en el planeta, por dedicarse a las cuestiones y análisis locales. No entrelazan los acontecimientos globales con las situaciones locales, no persiguen el origen de los fondos y del dinero de quienes asumen individual, institucional y organizacionalmente como caras visibles de estos planes en sus respectivos países y en el nuestro.
Nos hablan en palabras muy versadas y rimbombantes que debemos descolonizar nuestro pensamiento de la hegemonía impuesta por el sistema capitalista, pero ignoran que el comunismo soviético, la revolución bolchevique y el marxismo-leninismo fueron financiados por los mismos personajes que dirigen el sistema capitalista. Son dos caras de la misma moneda dirigidas detrás de cámara, en las sombras por las mismas élites que dirigen los destinos de la humanidad llevándola a un caos en pro de su supervivencia a costa de nuestras vidas. Ambos sistemas nos colonizan a los intereses de la misma gente.
Y cuando vamos a ser Bolivarianos y Robinsonianos más allá de la demagogia que llevan los labios de millones, cuando vamos a ser originales en la construcción de nuestros modelos, sistemas y formas de gobierno, para que necesitamos acudir a teoría foráneas que no se corresponden con nuestra realidad e idiosincrasia, teniendo un bagaje de elementos teóricos y de experiencia legado por nuestros más insignes pensadores y filósofos nuestroamericanos, escarbando en la filosofía de nuestras antiguas civilizaciones que pudieron construir innumerables maravillas arquitectónicas en su época, y ser conocedores de la magia elemental de la naturaleza, de la medicina tradicional, de la astrología, técnicas de agricultura, etc.…
Sin reflexión no habrá avance ni evolución. Mientras sigamos sumergidos en la ignorancia de lo que hacen y planean las élites, en la ignorancia del conocimiento de nuestra psiquis y máquina humana para entender como nos manejan y dominan, como nos engañan, mientras no desentrañemos las mentiras de la historia y no alertemos a la sociedad toda, seremos víctimas de las élites y sus lacayos vestidos de izquierda y de derecha, en una lucha que se traspolo a soberanistas contra globalistas y que tiene sus réplicas en todos los países del orbe y por supuesto en Venezuela. Por todo esto planteado, desde mi modesto punto de vista, creo que en nuestra amada patria se perdió la gobernabilidad.
Atte.
Licdo. Ramón Linarez
Docente Universitario.